La escuela generalmente se ha dedicado al aprendizaje de los conceptos, a la racionalización del conocimiento, dejando de lado el carácter expresivo y sensible propio del ser humano, olvidando que la base más importante que tiene el ser humano es el conocimiento, el juego, el lenguaje, las expresiones artísticas que sirven como un sistema de aprendizaje y enseñanza.
No todos los niños tienen cierta inclinación hacia lo artístico, por lo que el docente que enseña alguna disciplina artística proporciona una nueva forma de relacionarse con la realidad, cuestionando los modelos preestablecidos proponiendo opciones, imaginando alternativas partiendo de la observación de la realidad, formar educando que vean mas allá de las letras, que construyan sus propios lenguajes, alumnos propositivos, jóvenes que cuestionan el mundo, creadores de nuevas realidades, hombres y mujeres que tengan una visión diversa de la cultura y la idiosincrasia del país.
Teniendo como principal propósito generar experiencias relacionadas con los lenguajes artísticos como medio de expresión y comunicación, se habla de experiencias ya que esta se refiere a prácticas donde el arte se concibe como un espacio integrador que permite la heterogeneidad de las miradas y las interpretaciones.
CONDICIONES BÁSICAS PARA PENSAR EN EDUCACIÓN
· Una pedagogía que comprenda el arte, tanto como esfera estética como comunicativa, dos conceptos que en el arte son recíprocos y que puedan ayudar a los procesos de comunicación en la escuela.
· Una pedagogía que aplique la creatividad de los niños y las niñas como herramienta y no solo como fin o circunstancia aislada a las formas de aprender.
· Una pedagogía que mira a través de la sensibilidad y que requiera cada día más de ella.
· Una pedagogía que pueda llamarse “de la imaginación”, que desborda las posibilidades, los medios y las didácticas de lo que se puede ser tradicional en el ámbito de la escuela, una identidad particular desde el primer ciclo, rica, creativa y sensible.
· Una pedagogía que entienda que las formas de aprender, cada vez están más cerca de las formas de vivir y sentir propia de los niños y las niñas en su infancia, como el arte y el juego, territorios propios de los niños para entender y dar sentido al mundo que le rodea.
· Una pedagogía que abra un espacio significativo dentro de la escuela para el arte como elemento vital de la significación, construcción, transformación de la cultura y la sociedad.
· Una pedagogía que entienda y trate de aprender del arte para llevar a los niños a comprenderla e interpretarla.
EL ARTE EN LA CONSTRUCCIÓN DE CONOCIMIENTO
Se parte de la premisa de que el arte y la creatividad son herramientas cognoscitivas en la escuela. El arte como herramienta para construir y transformar la cultura y la creatividad que es un producto concreto desde las relaciones y las experiencias, como elemento que moldea y dinamiza los procesos de construcción de conocimiento.
La creatividad es un instrumento que describe ampliamente los procesos en los niños, su uso extendido en la escuela permitirá verla no solo como un gesto producto de, sino como aliada en los procesos de construcción de conocimiento, procesos que como fin, los describimos como esenciales en nuestra practica, porque generan riqueza y multiplicidad a nuestra preocupaciones de cómo entender.
Es por esto que para favorecer que durante el proceso de aprendizaje de los estudiantes sea importante que los docentes dispongan rutas para que los niños al momento de reflexionar y construir el conocimiento, entrelacen y circulen varios puntos de vista.
El dibujo, la construcción tridimensional en todas sus formas (arcilla, plastilina, objetos diversos) y la pintura apoyan los procesos de materialización de las reflexiones dentro de los proyectos, generan procesos ricos en detalles y reflexiones profundas y sensibles sobre el mundo.
La oralidad, la escritura, la música desde la lirica y el sonido aumentan el dialogo sobre las formas y procesos como los niños construyen conceptos.
